La delegada de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha en Ciudad Real ha cifrado el impacto de la caza en la región en 6.500 empleos fijos directos, cerca de 1,7 millones de jornales anuales y una facturación de unos 600 millones de euros al año.
Carmen Teresa Olmedo, delegada de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha en Ciudad Real, ha destacado el impacto económico que la actividad cinegética produce en Castilla-La Mancha.
Olmedo también ha subrayado que la caza contribuye además a fijar población en el mundo rural. "Más allá del mero carácter deportivo o de ocio, tiene una enorme influencia en la economía".
La delegada de la Junta ha expresado que la modificación de la Ley de Caza de Castilla-La Mancha persigue “compatibilizar la actividad cinegética con la conservación del medio natural” y resaltó la recuperación de la figura de los cotos sociales, suprimidos por el anterior Ejecutivo regional.
Así, Olmedo ha dicho que su fin es "mantener la actividad real de la caza en los pueblos como actividad más sostenible y facilitar su práctica en igualdad de oportunidades para las personas sin suficientes recursos para hacerlo en grandes cotos particulares".
Por último, la delegada de la Junta ha remarcado otra de las medidas que incorpora la nueva Ley de Caza, como la exención de la tasa de la licencia de caza y pesca a los jubilados mayores de 65 años residentes en Castilla-La Mancha.
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