|
Gómez, "Mancheguito", "Chele" y Ercilla en el singular patio de cuadrillas antes de la charla. |
Nadie mejor que la collera formada por José Ortiz "Chele" y Paco Gómez para recuperar la memoria fotográfica de los primeros 40 años de la Peña Taurina Niño de Aranjuez a través de la exposición audiovisual antológica celebrada el jueves en el CC Isabel de Farnesio.
Aficionados y fotógrafos, el dúo Gómez - "Chele" (tanto monta) culminó su trabajo de dos años de recopilación y documentación fotográfica con la charla "Peña Taurina 'Niño de Aranjuez' 40 años de historia" ofrecida a más de 70 personas reunidas en el CC Isabel de Farnesio.
5.000 fotos revisadas y catalogadas y resumidas en medio millar que recogen la memoria visual de una de las asociaciones con más solera de la ciudad.
Con el verbo conductor del periodista taurino de la COPE Jesús García Ercilla y con la emocionada presencia en el estrado del presidente de la entidad, Manuel López "Mancheguito", el proyector ofreció a lo largo de casi dos horas un reencuentro con los sentimientos de varias generaciones.
Marcial Lalanda, Domingo Ortega y Pedrés. O El Viti, Niño de la Capea y Julio Robles. O Espartaco, José Tomás y El Juli... Carteles que se pueden confeccionar con las figuras de los últimos cuarenta años y de muchos más lustros atrás que dieron relumbrón a las cenas y entregas de los trofeos -Fresón de Oro y Plata- en una abarrotada La Mina, cuando eran 600 los socios de la Peña.
Unas celebraciones con aún mucho humo en los salones y mucho sabor de la torería local o de la asimilada por la vecindad (Palomo Linares, Juan Cuéllar, José Luis Seseña, Luis Milla, Julián Zamora).
Años de capeas, paellas y ciclos de conferencias con lo más granado de la pluma crítica (Díaz-Cañabate, Vidal, Carabias, Molés, Mariví Romero), de la ganadería brava (Victorino, Hernández-Pla, Buendía) y de la cirugía taurina (García de la Torre, García Padros, Alcorta).
El apoyo como asociación (desde 1978) a todo tipo de eventos culturales de la ciudad (firmas para los galardones de Sampedro o los Amotinados).
Todo ello desfiló ante los ojos de, quizá, el último reducto de la afición local, que estuvo encabezada por la alcaldesa, Cristina Moreno, quien en su presentación del acto dejó firmemente asentada su condición de taurina.
Allí estuvieron Pablo y Juan, quienes no necesitan apellidos, como no les hace falta a Orencio, a "Yiyo", a Tomás o a Julio. O a Rocío y Cristina, hijas del matador ausente que da nombre a la Peña.
En la sala, la delegada de Cultura, Lucía Megía, y los portavoces de IN-PAR y Acipa, Juan Carlos Ramírez y Jesús Blasco, y en la memoria de cada uno, sus momentos únicos vividos en el tan sui generis local de la Casa Atarfe entre fotos de Manolete y de Belmonte, de futbolines de a cinco duros la partida y de botellines oyendo en la cadena única las loas a Ruiz Miguel, Esplá y Tomás Campuzano con una de Miura en la voz de Matías Prats Cañete.
Noticias relacionadas